Mañana, millones de personas maldecirán mi nombre y me odiaran por esto.... Adolf Hitler.
"El Hundimiento" ya puede considerarse uno de los mejores dramas bélicos de la historia, igualando e incluso superando el nivel de ciertas películas como
"Salvar al soldado Ryan",
"Sin novedad en el frente" o
"Das Boot:El Submarino". Aunque anteriormente se filmaron dos películas que relataban el mismo hecho,
"Hitler:Los Ultimos Diez Días" de 1973 o la protagonizada por Anthony Hopkins en 1981,
"El Búnker", ha tenido que pasar más de medio siglo, coincidiendo más o menos con el 60 Aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial, para que por primera vez una producción alemana destaque a Hitler como figura central.
Bruno Ganz da vida al más grande desafío de su carrera y a uno de los personajes más odiados de la historia, Adolf Hitler. Desde el primer momento que aparece, te da la sensación de ver en la pantalla al Führer, cada gesto, cada mirada, su manera de saludar, su postura algo encorvada, su temblor en la mano, sus ataques de histerismo, una credibilidad que asusta, aunque es una lástima no haberla disfrutado en versión original y oir el esfuerzo de Ganz en cada diálogo, de como da fuerza a cada palabra.Tampoco hay que desdeñar su increíble maquillaje y su acertado vestuario.Ha habido cierta polémica por el hecho de retratarlo de manera más humana, pero en mi opinión Bruno Ganz borda su interpretación, refleja de manera casi perfecta a un hombre hundido, desesperado, fanático, casi rozando la locura.... enfatiza esos sentimientos humanos propios de alguien en su situación. A pesar de las atrocidades que ordenó cometer, resultaría equivocado solo tratarle como un demonio sin corazón.Hacia el final de la película, vemos que Hitler ya no está al mando de nada, ni del país que intentó llevar a la gloria, ni de su propia mente.
No sólo Bruno Ganz realiza una excelente interpretación ya que uno de los motivos por los cuales la película funciona a la perfección son sus actores.Ninguno en sus pequeños o grandes papeles decepciona, hacen un retrato muy serio y creible de sus respectivos personajes. El argumento, más que girar entorno a la figura de Adolf Hitler, lo hace alrededor de su secretaria privada Traudl Junge, sobre la cual se basa la película, ya que sus memorias sirven para mostrarnos los últimos y angustiosos días de quienes se ocultaban en el búnker de la Cancillería. Es difícil destacar a alguien más que a Bruno Ganz en sus actuaciones, ya que están a un nivel excelente, tal vez sorprenda y angustie el papel de la esposa del Ministro de Propaganda Goebbels, dada su frialdad al tomar una decisión muy escabrosa, una escena difícil de mirar, una clase de devoción ciega a una persona, a una idea que estaba a punto de extinguirse, junto con el histrionismo del propio Goebbels, esa sumisión acérrima a cualquier orden y decisión de su Führer. Cuando más se acercan los rusos, vamos viendo los destinos que sufren cada uno de ellos y llegando a los créditos finales, vemos lo que les pasó a los que salieron del búnker, de esa manera nunca pierde su enfoque principal y nos permite absorver la terrible tragedia humana en vez de llenarnos de excesiva información.
Uno de los motivos que puede despistar al espectador es tal vez el baile de nombres que se suceden, quien no tenga ciertas nociones de lo que allí aconteció puede verse un poco perdido.Goebbels, Goering, Keitel, Jodl, Himmler.... funestos personajes de menor relevancia que Hitler, pero no exentos del mismo fanatismo y atrocidades, no pueden ser excluidos de todo lo que pasó, pero no se profundiza demasiado en ellos, a excepción de la familia Goebbels. El director
Oliver Hirschbiegel, que ya demostró su talante con la excelente película
"El experimento", muestra la atrocidad de la Batalla de Berlín con realismo y crudeza, desde los hospitales, donde la gente sufría las amputaciones y los bombardeos, desde la lucha encarnizada en las calles, donde jóvenes, niños y niñas, defendían una posición con un fanatismo inexplicable, de como ahorcaban a sus propios conciudadanos.... y su ambientación es excelente (curiosamente rodada en San Petersburgo, antigua Leningrado). Como en
"Stalingrado" o
"El Pianista" vemos una réplica realista de una ciudad devastada por las bombas, los bombardeos son impresionantes, nada que envidiar al cualquier superproducción norteamericana. Tampoco Hirschbiegel muestra ningún partidismo, relata los hechos tal y como acontecieron con datos históricos muy extensos y exactos de los acontecimientos que ocurrieron en los días previos a la caída de Berlín.El cine hecho sobre el dictador a menudo decepciona por que los directores suelen ser muy cautelosos con esa materia, pero Hirschbiegel da un paso adelante, contando su historia con rotundidad, sin aderezos y rumores que desprestigien o avalen ciertos aspectos personales de Hitler (como su supuesta homosexualidad o su posible fuga del búnker)
La exactitud de los datos históricos es crítica, porque esa adhesión a la verdad impide que la película se reduzca a un simple chismorreo sobre la muerte de Hitler. Poco a poco la trama va adquiriendo su punto culminante en el final tremendamente triste (muchos dirán que merecido) de una serie de personas que ambicionaban con dominar primero Europa, después el mundo, causando el sufrimiento a miles de personas inocentes.Después de tanto tiempo desde la muerte de Hitler, con casi todos sus confidentes,oficiales, generales, etc. en la tumba, la figura del Führer, que prometió un Reich de mil años, posiblemente el hombre más malévolo e importante del siglo XX aún sigue fascinado a los estudiantes de historia y a mucha gente en general. Su nominación al Oscar está más que justificada, resulta incomprensible que no está nominada a más categorías, pero es uno de los mejores dramas, no solamente bélico, sino humano que jamás podreis ver. Lejos de inclinaciones políticas, odios, de verdades absolutas sobre lo que pasó, es conmovedor y triste ver las desgracias que sufrió la gente por culpa de una idea, de un odio, de una ambición, de ver como el carisma endiosizado por muchos de Hitler era seguido hasta extremos insospechados, de como su orgullo, su honor y su prepotencia estaba por encima de su pueblo, de su gente, de esa Alemania que quisieron hacer tan poderosa a costa de 50 millones de muertos.
No dejeis de ver "El Hundimiento", seguro que no os arrepentis.
Desde luego que yo no me he arrepentido de verla.Recuerdo haber leído este post hace tiempo, y me acordé de él antes de ver la peli:-) Hoy lo releo con la película ya vista y entiendo tu entusiasmo y que la recomendaras... A veces me da pereza ponerme una de bélico y sin embargo luego me encantan:casi siempre lo de los géneros son meros corsès que no dan cuenta de lo que hay detrás. Como dices es un drama que se merecía más.
ResponderEliminarSaludos y gracias!!!
Patricia